
El arte de dialogar con la IA: claves para una interacción significativa y ética
¿Es posible establecer un auténtico diálogo con la inteligencia artificial? Este interrogante se sitúa en el centro del debate contemporáneo, donde la IA redefine el modo en que aprendemos, creamos y resolvemos problemas. Más allá de la destreza tecnológica, la diferencia crucial radica en la habilidad para formular preguntas profundas, pertinentes y estratégicas, las cuales impulsan el pensamiento crítico y el aprendizaje colaborativo (Bustamante Bula y Camacho Bonilla, 2024).
Dialogar con una IA implica mucho más que emitir comandos. Supone adentrarse en un proceso interactivo, donde la calidad del intercambio depende de la construcción de Prompts sucesivos y del reconocimiento de que, detrás de cada respuesta, subyacen patrones, ideologías y límites definidos por decisiones humanas (Aguiar Morazzani, 2025).
La elaboración cuidadosa de indicaciones, el ajuste progresivo de los planteos y la retroalimentación constante resultan esenciales para favorecer un diálogo verdaderamente enriquecedor. Este enfoque permite que la IA actúe como interlocutora que amplía perspectivas, aporta creatividad y contribuye en la búsqueda de soluciones en diversidad de contextos profesionales y educativos.
La educación constituye un entorno privilegiado para este “arte de dialogar”. Experiencias como las de Sentidos en Red evidencian que promover preguntas colaborativas y reflexivas en la interacción con IA enriquecen la escritura, el debate y el diseño de actividades y evaluaciones en el aula. Entre las buenas prácticas sobresalen: contextualizar adecuadamente el problema, utilizar un lenguaje inclusivo y exponer con claridad el pensamiento esperado, de modo que la IA pueda enriquecer el análisis, aportar enfoques novedosos y contribuir a respuestas adaptadas al contexto real de los/as usuarios/as.
Sin embargo, los beneficios de la IA no están exentos de riesgos. Como advierte Dierssen (2024), un uso desmedido de asistentes inteligentes puede afectar la memoria y la autonomía en la resolución de problemas. Por ello, es fundamental alcanzar un equilibrio: aprovechar la IA para potenciar el tiempo creativo, sin relegar la responsabilidad ética, el juicio pedagógico y el ejercicio intelectual autónomo.
Autores/as como Aguiar Morazzani (2025) sostienen que la construcción del diálogo humano-IA es un proceso activo y bidireccional, en el que la persona usuaria aporta contexto, valores y sentido, mientras que la IA responde desde marcos operativos programados y, simultáneamente, abiertos a la colaboración. Esta perspectiva invita a una interacción deliberada y ética, evitando tanto la idealización ingenua como la desconfianza injustificada hacia la tecnología.
Así, el diálogo con la IA se constituye en una práctica social, ética y pedagógica valiosa cuando estimula la reflexión crítica, la creatividad y la autonomía. El desafío para la comunidad educativa y científica consiste en preservar la agencia humana, formulando preguntas, evaluando respuestas y devolviendo la discusión al ámbito colectivo, donde la ética, la diversidad y los valores humanos continúan nutriendo el potencial transformador de la inteligencia artificial (UNESCO, 2024).
Desde esta perspectiva, el arte de dialogar con la IA emerge hoy como una competencia imprescindible: consiste en preguntarse, repreguntarse y analizar críticamente, para aprovechar lo mejor de la máquina sin perder la profundidad, la diversidad y el sentido que distingue a la experiencia humana.
Lic. Esp. Valeria Bustos y Mg. Lic. Antonela Romero
Fuentes:
Aguiar Morazzani, M. (2025). Diálogos socráticos con IA: El arte de conversar de manera estratégica. LinkedIn . https://es.linkedin.com/pulse/di%C3%A1logos-socr%C3%A1ticos-con-ia-el-arte-de-conversar-aguiar-morazzani-2kkef
Bustamante Bula, A., & Camacho Bonilla, S. (2024). (Enseñar a) leer y escribir con inteligencias artificiales generativas. Enunciación, 29 (2). https://revistas.udistrital.edu.co/index.php/enunc/article/view/22891 Dierssen, M. (2024). El uso excesivo de la inteligencia artificial debilita nuestra memoria y reduce la capacidad para pensar críticamente y resolver problemas de manera independiente. Real Academia Nacional de Medicina de España . https://ranm.es/2024/04/el-uso-excesivo-de-la-inteligencia-artificial-debilita-nuestra-memoria-y-reduce-la-capacidad-para-pensar-criticamente-y-resolver-problemas-de-manera-independiente_np/
Escuela MBIT. (2025, 23 de marzo). Prompt Engineering: La habilidad top en IA generativa en 2025. https://www.mbitschool.com/actualidad/prompt-engineering-la-habilidad-top-en-ia-generativa-en-2025
Sentidos en Red. (2025). Cómo prepararse para la era de la IA [Publicación en Instagram]. https://www.instagram.com/p/DL0ziLgR6Du/?img_index=5
UNESCO. (2024, 16 de mayo). El uso de la IA en la educación: decidir el futuro que queremos. https://www.unesco.org/es/articles/el-uso-de-la-ia-en-la-educacion-decidir-el-futuro-que-queremos
Imagen:
Imagen generada con Copilot IA.
Prompt:
Conversación dinámica y creativa entre una persona con la IA en un entorno digital, énfasis en pensamiento crítico y cooperación.
Excelente! Nuevas competencias a desarrollar sin perder la reflexión critica, «la profundidad, la diversidad y el sentido que distingue a la experiencia humana»
El diálogo con la IA requiere una interacción cuidadosa, reflexiva y ética, donde la calidad del intercambio depende de la construcción de preguntas profundas y estratégicas. La educación es un entorno privilegiado para desarrollar esta competencia, que puede enriquecer el aprendizaje, el debate y el diseño de actividades. Sin embargo, es fundamental alcanzar un equilibrio entre el uso de la IA y la responsabilidad ética, el juicio pedagógico y el ejercicio intelectual autónomo. El desafío consiste en preservar la agencia humana y estimular la reflexión crítica, la creatividad y la autonomía en la interacción con la IA.